El calor empieza a apretar y las ensaladas frescas de verano van tomando protagonismo en las comidas del día a día, por su aporte nutritivo, su ligera carga calórica y sobre todo por la cantidad de agua que aportan al organismo y la acción refrescante. Por eso, vamos a dedicar este post a hacer una pequeña lista de flores comestibles que puedes incluir en tus ensaladas y otros platos, para darles color y un toque algo distinto al habitual.

Consejos para prepararlas

  • Cortarlas por la mañana, antes de que sea la hora de más intensidad solar
  • Escogeremos las de mejor estado y las que presenten buen olor
  • Desecharemos los estambres, tallos, pistilos y la base blanca de los pétalos porque suelen aportar sabor amargo
  • Antes de su uso, las lavaremos bien con agua fría secándolas con papel absorbente cuidado de no estropear los pétalos o bien colgándolas boca abajo para escurran poco a poco
  • Las flores comestibles no se pueden conservar mucho tiempo, así que es mejor recoger solamente las que vayamos a usar o bien si son comerciales guardarlas en su envase en la nevera, donde se mantienen una semana.

1. Albahaca (Ocimum basilicum)

La flor de esta planta tiene un sabor parecido a sus hojas. No obstante el toque que tienen las flores es mucho más suave y por eso suele acompañarse en ensaladas como complemento ideal. Sus colores blancos o lilas le dan un toque colorido muy bonito.

2. Amapola (Papaver rhoeas)

Como ya se conoce, la amapola se caracteriza por su color rojizo. Es importante que sus flores se consuman antes de que se formen los capullos de las flores porque suelen adquirir toxicidad. Sus pétalos también se utilizan para aromatizar bebidas alcohólicas como el vino.

3. Boca de dragón (Antirrhinum majus)

Esta flor es muy curiosa -no solo por su nombre. Tiene unos colores pasteles muy suaves y delicados que tienen a blanco, morado y amarillo. Estas características la hacen una decoración ideal en tartas y ensaladas. Su sabor suele ser suave pero en otras especies puede ser más fuerte.

4. Capuchina (Tropaeolum majus)

Estas flores son unas de las más conocidas y vendidas en todo el mundo. Son totalmente comestibles y se utilizan normalmente en ensaladas. Tienen unos colores que varían entre el rojo, el naranja y el amarillo y su sabor es un poco picante. También pueden acompañar bien a legumbres, arroces o patatas.

5. Clavel (Dianthus caryophyllus)

El color de esta flor suele ser diferente en función de la especie pero aún así el más característico es el rojo. Tiene un sabor muy aromático con diferentes tonalidades de pimienta, clavo y otro tipo de especias. Por ello es un condimento perfecto en ensaladas, macedonias o mantequillas.

6. Jazmín (Jasminum officinale)

Esta flor comestible natural es de color blanco intenso y suele acompañar a platillos hechos con aves como pollo o pavo, así como a guisos con pescados. También se utiliza ampliamente en infusiones y en cubitos de hielo utilizados para cócteles más sofisticados.

7. Rosa (Rosa spp)

La rosa es la flor por excelencia. Su sabor es dulce y un poco picante. Se recomienda sobre todo su uso en pasteles, tartas, helados, mermeladas y ensaladas de frutas. Cuando se escarchan con azúcar constituyen un bocado exquisito.